Curioso lo de Paulo Iago. Este chico era nuestro Lamine Yamal, hasta hace poco más de un año.
De repente cayó en picado tras una lesión breve y no grave. Perdió la titularidad del Juvenil en favor de Yañez, salió de la selección, salió del Madrid...
Ayer miré en transfermarkt a ver qué tal le va en Portugal y lleva exactamente 1 minuto jugado esta temporada.
Paulo Iago es el ejemplo del jugador que piensa que con lo bueno que es (que lo es), le da para ser un crack.
Además de no desarrollar físico, como dice Cascarino, tampoco ha desarrollado juego colectivo. En categorías inferiores, le valía con su técnica para sobresalir. Pero según iban creciendo, si a esa técnica no le añades trabaja, te acaban comiendo el bocadillo. Se le veía como cada año iba perdiendo protagonismo.
La sentencia definitiva vino cuando Arbeloa fue incapaz de sacarle nada que hiciese pensar que merecía ser titular en su juvenil. Un Arbeloa que, sí algo hace, es que sus jugadores parecen todos mejores de lo que son. Pues Iago era todo lo contrario. Cada vez parecía peor.
Se podría pensar que la culpa era De Arbeloa, no siempre va a acertar. Pero es que en la selección era igual de residual.
Si a eso le añades que Mendes se acabó metiendo por medio. Fue la guinda del pastel “soy el mejor y mi representante es el mejor”. El resultado es que ahora anda perdido por esos mundos. En parte me recuerda a Bruno Iglesias. Que se creen tan buenos, que lo de jugar en equipo y esforzarse no va con ellos.
Por cierto, en la cantera tenemos otro ‘bruno’ u otro ‘Paulo’. Braian Bugarín, en edad de cadete. Es un calco de los otros dos. Mucho talento, pero poco sacrificio. Veremos si acaba como ellos, o, al menos, se convierte en un Valerón (a mi me lo recuerda ).
Otro por cierto, ahora mismo, el jugador con más potencial de la cantera, aunque está en el último año de infantil (ya sé que le queda mucho por crecer), es Alberto Ruiz-Santa. Tiene una superioridad frente a cualquier rival, que asusta. Todos los equipos le hacen marcajes individuales, con ayudad de uno,o dos jugadores.
En cuanto Manuel Ángel, es todo lo contrario a Bruno y Paulo. Para Mami, que así le llaman, lo primero es el equipo, y luego él. Si algo hace, además de ser un jugón, es esforzarse. También su posición es más de trabajo. Mientras los otros son interiores o medias puntas, él es pivote creativo. Su problema, que es bajito y que no tiene demasiado cuerpo. Aunque yo este año le veo más hecho. Veremos hasta dónde llega.