Varias cosas. Por qué el asunto es complicado.
A mí la necesidad de la Superliga me parece obvia. Más obvia,
aún, la de quitar todo poder mayoritario de decisión a la UEFA y a la FIFA.
Ellos deberían poner las normas del juego y ciertas regulaciones,
pero su poder va más allá de ahí. Se quedan con el pastel de la competición,
opacidad absoluta, corrupción “legalizada” y “generalizada” y casi con igual poder
de decisión del futbol eslovaco que el español (con todo el respeto a Eslovenia).
Eso por encima y hablando a groso modo.
Luego esta Tebas y su LFP, donde una mayoría somete a la
minoría que es la que verdaderamente generan valor añadido a la competición. La
cacicada de los derechos de TV no fue pactada como debería haberse realizado minimamente, sino que fue impuesta. Al final, haces a Madrid y Barca menos
competitivos mundialmente, la Liga pierde valor, los derechos valen menos y así
sigue un círculo vicioso de decadencia. Que un 8º de la Premier cobre más que
el Real Madrid en derechos de tv, siendo estos la fuente principal de ingresos
hace una década, a ver como es de sostenible a largo plazo sin que se note.
Por último, está el incumplimiento por ciertos equipos FPF, que ha reventado financieramente el
mercado de forma absoluta, por obra y gracia de una UEFA que ha actuado con
completa inanición por interés personal y cero transparencias (porque los
pillaron, que si no….).
A mí el sistema de competición me parece mejorable. Muy
mejorable. Pero el anterior de “Liga total” que se rumoreaba era mucho peor.
Que haya equipos fijos me disgusta bastante. El Arsenal, más
allá de la historia, es menos competitivo hoy que por ejemplo un Nápoles.
Que haya el doble de ingleses que españoles e italianos
tampoco me agrada. Pero entiendo que es lo que hay. Ellos tienen el mercado
internacional, que han ido consolidando en la última década. Tienen la
competición más potente televisivamente, la que queremos derribar, así que no
queda otra que aceptar eso.
Me gustaría que hubiera una Primera y Segunda División, sin
equipos fijos.
La Copa de Europa tradicional, la del Steraua o Estrella
Roja murió con su renacimiento en los 90s, permitiendo que no solo los campeones fueran
sino los terceros y cuartos de los países punteros. Se elevó la competitividad
del torneo de forma bestial, disminuyó la capacidad de sorpresa de rivales menores, ganó valor añadido y finiquitó todo el valor de
los torneos secundarios como UEFA o Recopa.
El futbol (el deporte, en general) evoluciona. Todo cambio
siempre tiene resistencia. Pero puede empeorarlo así que no debe ser cambiar por cambiar.
Florentino y, por ende, el Madrid, corre un riesgo terrible.
Es el presidente de la Superliga porque hemos sido los principales impulsores.
Junto al otro grande, el United. No es casual. El futbol debe ser
autosuficiente y no en lo que se ha convertido hoy, más parecido a lo que llevo
a la ruina en los 90s a muchos clubes históricos. Al mismo Madrid.
Pero respecto al riesgo, espero que Florentino lo tenga todo
atado y bien atado. El hacer firmar al resto de clubes era imprescindible. Que
nadie se puede rajar salvo, probablemente, que haga frente a una penalización
inasumible.
Por qué que hay quien se tiraría del barco, cual ratas, en los momentos complicados (que los habrá; por ejemplo, hoy). El daño del club por ser la cara de la revuelta sería
irreparable.
Lo del PSG y el Bayern, pues son 2 clubes con circunstancias
peculiares. Uno tiene un Mundial por jugarse el año próximo que “ha comprado”
con sobornos y favores; tiene gente en los órganos de poder; les han
hecho la vista gorda en sus violaciones del reglamento y son dueños de los
derechos de una competición que ahora tiene un valor muchísimo menor.
El Bayern, por su parte, tiene un poder en la Bundesliga
histórico que no existe en España o Inglaterra. Despedaza a cualquier equipo
que ose competirle o ganarle la competición. Se hace con sus
jugadores y se deshace del rival.
Que Francia y Alemania sean las cabezas políticas de la UE
que también se han manifestado, rotundamente en contra, quizás también influya.
Esto al final será una partida de cartas pero necesitamos,
por lo menos, al Bayern porque a los aficionados de todo el mundo los hemos perdidos y ahí tiene
una carta muy ganadora la UEFA.
Didácticamente, Florentino ha estado nefasto. Políticamente,
correcto. Se ha dedicado a lanzar sloganes
La regla alemana mínima del 50+1 que quiere imponer Johnson
a los equipos Premier ya podía haberla impulsado la UEFA en toda Europa. Pero
no interesaba. Y probablemente se quede en una amenaza de Johnson porque, si un
país ve peligrar su gallina de los huevos de oro, ese es Inglaterra. Por qué el
futbol es un negocio y no es de la gente, como barruntaban hoy las
instituciones. Ese sí que es un slogan que vende y que podría haber desarmado Pérez
con argumentos.