Se puede tener mala suerte en momentos puntuales, no lo niego, pero Neymar tampoco rehuye ninguna ocasión en la que pueda salir trasquilado.
A mí el caso de Neymar me recuerda cada vez más al de Ronaldinho, jugadores de enorme calidad pero que se pierden por su entorno, por su cabeza, por muchas cosas.
Neymar ha jugado esta temporada 28 partidos en todas las competiciones, el año anterior 30. En las dos últimas temporadas que jugó en el Barcelona, con sus problemillas, con el cumpleaños de su hermana mediante y tal, jugó un total de 94, casi el doble en el mismo periodo. Es cierto que ha tenido lesiones más importantes que cuando estaba en Barcelona(qué novedad que allí no se lesione muscularmente nadie... otra de las cosas que sabremos en el futuro...) pero la sensación de que su dedicación al deporte se ha diluído está ahí.
Problemas extradeportivos, constantes rumores de salida... en un club donde lleva dos temporadas. Está claro que irse al PSG por dinero fue un error para él, aunque su padre se llevara mucho dinero(y él también). Estar en un ambiente menos competitivo día a día, más distendido con respecto la obligación de ganar porque tienes 30 puntos de ventaja en el día a día y la competición es de menor calidad y exigencia es un problema para jugadores como éste.
Da la sensación de que su interés y cabeza está fuera del fútbol. Y de ahí todos los problemas que vienen detrás. Es un jugador con un talento tremendo, posiblemente tras Messi el mejor talento que haya, quizá junto con Hazard, en cuanto a técnica y fútbol. Pero en estas circunstancias está en un momento muy peligroso de tirar por la borda su carrera.