Al chico se le ve sobrado en la floja liga holandesa donde Ødegaard parecía el nuevo Laudrup, aún así, tiene las cualidades físicas y técnicas para ser un centrocampista dominador.
Van a querer venderlo porque entrará en su último año de contrato, dependiendo de lo asentada que tenga la cabeza estaría dispuesto a pujar más o menos, porque la mayoría de estos jugadores talentosos tiene un ego desequilibrado y dar con uno con mentalidad ganadora es muy difícil, más cuando con unas cuantas filigranas tienes la vida resuelta, coches y la mujer florero que quieras.
Dada la escasez de centrocampistas con esas cualidades técnicas merece la pena tantear nuestras posibilidades.